El durián es un acorde que recrea el controvertido aroma de esta fruta tropical, conocida por su intenso perfil olfativo. Se caracteriza por su compleja combinación de aspectos sulfurosos y frutales dulces, diferenciándose de otros acordes frutales por su marcado carácter que fusiona notas que van desde lo pútrido hasta lo cremoso almendrado.

Su perfil olfativo combina facetas sulfurosas intensas y notas de almendra cremosa con matices de cebolla caramelizada. El aroma desarrolla aspectos lácteos rancios y frutales tropicales maduros, complementados por toques de huevo cocido y un fondo dulce y almendrado característico. Técnicamente, se construye mediante una cuidadosa combinación de compuestos sulfurosos, ésteres frutales y notas cremosas para lograr el realismo de esta compleja fruta.

En la perfumería contemporánea, el acorde de durián se utiliza raramente y principalmente en concentraciones muy diluidas como modificador de fondo para aportar complejidad tropical. Se combina ocasionalmente con notas cremosas, elementos tropicales y acordes lácteos, siendo útil en cantidades mínimas para aportar un carácter único. Destaca principalmente en creaciones experimentales o en perfumes que buscan explorar aspectos más desafiantes de la paleta olfativa tropical.