La levadura es un acorde que representa la nota característica de este fermento natural. Se caracteriza por su perfil único que combina aspectos fermentativos con matices harinosos y ligeramente agrios, diferenciándose de otros acordes fermentados por su cualidad distintivamente panificada y su carácter cálido que evoca el proceso de fermentación activa.
Su perfil olfativo fusiona notas fermentadas con matices harinosos y una faceta ligeramente láctea. El aroma desarrolla aspectos de pan fermentando y una cualidad cálida característica, complementados por toques maltosos sutiles y un fondo tenuemente dulce que aporta profundidad. Técnicamente, se construye mediante la combinación de elementos fermentativos, notas harinosas y aspectos maltosos para recrear el aroma complejo de la levadura activa.
En la perfumería contemporánea, el acorde de levadura se utiliza como un modificador especializado que aporta carácter y autenticidad. Se combina principalmente con notas gourmand, elementos maltosos y acordes fermentados, siendo especialmente valioso en fragancias que buscan un efecto de fermentación realista. Destaca en creaciones que requieren un toque de autenticidad fermentativa, desde perfumes gourmand hasta composiciones experimentales modernas.